Hola FAMILIAAAA! ! Este año hemos llevado la danza a otro nivel, explorando desde los ritmos ancestrales del “afro” hasta la vibra moderna del “comercial”, pasando por la expresividad del “contemporáneo” y, cómo no, nuestra alma de la fiesta: el FUNKY.
La danza, en todas sus formas, es una celebración del movimiento humano, pero el funky y los estilos urbanos van más allá. Cuando bailamos, no solo movemos el cuerpo: liberamos emociones, desatamos historias y compartimos nuestras vibras más auténticas. Es un desahogo, una forma de decir al mundo quiénes somos y cómo nos sentimos, sin necesidad de palabras.
Este año ha sido una auténtica revolución para las/los “funkyzales”; el crecimiento que han mostrado es simplemente brutal. Han perfeccionado su coordinación y agilidad a niveles que ni yo mismo esperaba tan rápido. Sin embargo, debo admitir que, con el ritmo acelerado de nuestras clases, no hemos podido profundizar tanto en el trabajo con las emociones, ese componente esencial que transforma el baile en un verdadero diálogo del alma. Pero esto no es más que el principio. Tengo la firme intención de dedicar más tiempo y espacio en el futuro para explorar y desarrollar esta dimensión emocional del baile, asegurándonos de que cada alumno no solo domine los pasos, sino que también conecte con su esencia emocional a través del movimiento. Esta evolución es un viaje, y cada clase, cada paso es un paso más hacia ese profundo entendimiento de lo que significa realmente bailar.
Para finalizar este año nuestro viaje a través del ritmo y la expresión, me complace anunciar que el próximo 1 de junio, a las 19:30, celebraremos una actuación de fin de curso. Este año la exhibición será en la calle (Placido Mujica) y no será solo una demostración de lo aprendido, sino una verdadera fiesta del espíritu humano, donde la energía y pasión de nuestros alumnos prometen ofrecer un espectáculo sin precedentes. Os invito a todos a ser parte de esta experiencia única, donde la danza se convierte en un puente entre el alma y la expresión libre.
Erik Frutos
Profesor de funky